"Jugamos de Primera"

Atlético de Tucumán y Chacarita son los dos equipos que concretaron los ascensos directos a la máxima categoría del fútbol argentino. El Decano fue el mejor de la temporada, el más sólido y regular, selló la gran campaña con una goleada a Talleres en el Chateau Carreras, a dos jornadas del final. Mientras que por el lado Funebrero tuvo un partido bravísimo ante el Calamar en La Plata a puertas cerradas, una pena pero la AFA quiso prevenir accidentes. Chaca se lo llevó en el minuto 44 del complemento con gol de Echeverría en un partido parejo pero que sobre los últimos 15 lo metió en un arco a Platense hasta que el uno a cero y el ascenso llegó. Los de San Martín fueron los punteros por largo rato durante el año hasta que los tucumanos se subieron y le sacaron el primer lugar de la tabla. Los dos merecían este premio. Caravanas en Tucumán y multitud en el barrio de los Funebreros para recibir a ambos con mucha alegría, esa alegría que pocas veces se ve. Los técnicos fueron una parte importantísima en este logro. El Ruso Zielinski y el Chulo Rivoira, que reemplazó a Solari a mitad de este camino, son parte fundamental de éste éxito conseguido con fútbol, goles y con un buen plantel. El primero reemplaza al ya descendido Gimnasia y Esgrima de Jujuy, mientras que el segundo tiene que esperar por el otro club que pierda la categoría, será entre San Martín de Tucumán (lo cual sería un alegrón para los de Atlético), Gimnasia y Esgrima de La Plata y Rosario Central. Hace un año el "Aleti" jugaba en el Argentino A, y ahora su realidad es totalmente diferente, esta es su primera incursión en la A. Los de el Ruso debieron esperar cinco temporadas para volver a la Primera A. Funebreros y Decanos esbozan las sonrisas más lindas de la vida de un hincha, un ascenso y mucho más si es a la máxima categoría. Hoy, ya tenemos los dos ascendidos directamente, los simpatizantes invaden las calles con bombos, trapos y casacas. La felicidad de ser equipos de Primera, porque juegan de Primera.