24 de junio de 2010

In can sa bles

El homenaje para dos monstruos del circuito actual que se raquetearon durante 11 horas y 5 minutos para batir todos los records. John Isner venció en la primera rueda de Wimbledon al francés Nicolás Mahut por 6-4, 3-6, 6-7, 7-6 y 70-68, en un épico partido que se jugó en tres días. Fueron distinguidos ambos por ser los dos protagonistas del duelo más largo de la historia del tenis profesional en la mismísima Catedral del deporte blanco y que tiene muchísimas marcas a batir de aquí en más.

John Isner (23) a Nicolás Mahut 6-4, 3-6, 6-7, 7-6 y 70-68

La postal a la posteridad. Inigualables...

Qué curioso será para el periodista francés y norteamericano que se jefe le diga antes del match: "CUBRITE CON UN RESÚMEN EL PARTIDO ISNER VS. MAHUT". Hoy ese periodista debe estar a las carcajadas limpias tirado en el piso. ¿Cómo se hace para simplificar un suceso deportivo que tuvo 11:05 horas? Dificilmente haya una respuesta. Como primera medida, va a haber que dejar de lado muchísimas cosas, sobre todo los datos precisos, en cuanto a situaciones que se fueron dando en el partido, porque son paradojicamente olvidables. Si hay que destacar todos los records que batieron estos muchachos que más adelante vamos a detallar. Pero para iniciar el camino de este partido disputado en la cancha 18 de Wimbledon, habría que dar el puntapié en tiempo y espacio. Día Martes, 18.00 horas de Inglaterra. El partido llevaba un ritmo y un andar tradicional, como cualquier encuentro por demás parejo entre dos jóvenes y potentes sacadores, característica netamente beneficiosa en una superficie como es el césped. El primer parcial había quedado en menos de media hora en manos de Isner por 6-4. 34 minutos más tarde, Mahut respondería con un 6-3. A continuación y ya aproximándose a los 45 minutos del set número 3, Nicolás se lo llevaría en el tiebreak. Y en una hora y cuatro minutos, el cuarto se depositaría en el bolsillo de Isner también por la definición en la muerte súbita.

Debatiendo para seguir o no jugando el martes.

Partido parado por lluvia. La acción seguiría el miércoles. Hasta acá nada raro. Dos grandes hombres del servicio jugando un quinto set un día después por una cuestión climatológica y porque la paridad los llevó hasta ese lugar del partido. Saltaron nuevamente a la cancha a las 11.00 horas del país europeo. Un set que no tenía chances de quiebre, y en un Grand Slam, cuando se juega el último parcial no existe el tiebreak, es decir, que alguno de los dos debe conseguir una diferencia de dos games para llevarse el partido. Bueno eso precisamente no pasaba. Muy firmes con sus servicios, ambos tiraban la presión de lado a lado. Los games pasaban, pasaban y pasaban. Hasta que ya no era tan normal todo el desarrollo. 20-20 y muy cerca de un record de duración de Santoro y Clement en 2004 en Roland Garros. Fue 16-14 para Fabrice en el quinto. Ese obstáculo fue superado. Porque llegaron al 59 iguales en el quinto set. Para que usted tome noción, hasta allí, hasta el 59-59 en el tanteador (que de paso aclaramos se apagó llegando a la igualdad en 40, por el hecho de no tener más número para poner, jamás se pensó llegar a semejante resultado. Y hasta en la página oficial del torneo, ya figuraba un 9-9, cuando en realidad era el 59 en ambos lugares del marcador), ellos habían jugado 9:58 horas. Y para que tome dimensión de los sets hipotéticos y normales que jugaron, hasta ese momento, habían jugado 163 games, algo así como 20 sets que terminen 6-2. Impresionante e inimaginable. Pero el match se cortó por falta de iluminación. Y la acción continuaba hoy.

Y acá recién iban 35-34... Isner agotadísimo.

Imaginense el enorme despliegue físico de las últimas horas del día de ayer. Isner caminaba la cancha, las piernas ya no le respondían. Mahut atravesaba una situación corporal muy similar, lo que los obligaba a jugar con el saque, y cada winner (tiro ganador) era tal porque les era imposible llegar a pelotas que en otro contexto son luchables, pero en este maravilloso y alargado cotejo no tenían resolución ni respuesta. Y no se equivocaban, eran todos aciertos. Los errores fueron escasísimos que se dan en un partido normal de tres sets. Este fue equivalente a muchísimos más y tuvo muy pocos yerros y una fantástica cantidad de concreciones perfectas y de saques demoledores.

Palomita improvisada de Mahut ante la volea de Isner. Así quedó el miércoles...

Y hoy, para ver si de una vez por todas la paridad se rompía también hubo una espera importante. Jugaron 1:07 más de lo que ya se había acumulado, redondeando las 11 horas y 5 minutos de juego. En el tenis demostrado hoy, ambos se propusieron los puntos cortos, casi sin peloteo. Saque y devolución. O en su defecto un tercer impacto voleando en la red. Una notable muestra de tenis y de fortaleza mental, para sostenerse por 70 games Isner y por 68 Mahut, ya que ese fue el resultado final. Con McEnroe ovacionándolos desde la pequeña platea del court 18, con Tim Henman encabezando una entrega de premios a ambos por su descollante tarea. Con la bronca y decepción lógica de Nicolás, que no quería quedarse ya en esa cancha a fotografiarse delante del marcador, sin embargo, en el futuro cercano entenderá que hizo historia y de la grande, que no pudo con el Gigante Isner, no obstante, termina siendo lo menos trascendente. John deberá afrontar a Thiemmo De Bakker en pocas horas en lo que se preve una derrota casi lógica y abultada, pero no está nada asegurado, aunque el físico de Isner no de para más, es capaz de presentar batalla hasta donde pueda.
Entraron en la historia grande por la puerta chica de una cancha 18 que arrancó con 100 personas como testigos y que terminó con una multitud ovacionando a los dos enormes tenistas que demostraron que pueden jugar horas y horas. Un enorme reconocimiento al juez de silla del match, Mohamed Layani, que fue paciente ante semejante duelo y con tamaña duración. John y Nicolás quedarán en la historia fabulosa del deporte blanco, le contarán a sus nietos de la enorme hazaña de jugar durante tres días un mismo partido, de disputarilo durante 11 inolvidables horas, con dolores, fatigas, agotamientos, bananas para evitar los calambres, innumerables cambios de raquetas, de remeras, de jueces de línea y la espectativa de un público azorado ante una digna final de Wimbledon, inigualable por años, que se dio en una primera ronda.
Datos del partido:

JOHN ISNER (EEUU)

74% porcentaje del 1º saque
112 aces
246 tiros ganadores
52 errores no forzados
10 dobles faltas
14 posibilidades de quiebre
2 quiebres concretados
478 total de puntos ganados

NICOLÁS MAHUT (FRA)

67% porcentaje del 1º saque
103 aces
244 tiros ganadores
39 errores no forzados
21 dobles faltas
3 posibilidades de quiebre
1 quiebre concretado
502 total de puntos ganados

Records:
Mayor duración de un partido (11 horas y 5 minutos)
Mayor cantidad de games jugados en un partido (183)
Mayor cantidad de aces en un partido (Isner 112, Mahut 103)
Mayor cantidad de puntos en disputa (980)

1 comentario:

  1. Terrible partido el que disputaron. Igualmente despues Isner se cayo a pedazos ahora.
    Me parece que los organizadores van a reemplantearse algunas cosas a partir de esto, si bien es cierto que pocas chances hay que se vuelva a repetir; aunque sea que esten preparados los marcadores para tremendos parciales.

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