Misión Imposible 4

Lanús sufrió una derrota durísima que lo deja con un pie y la mitad del otro fuera de la Copa Sudamericana. Cayó en la altura de Ecuador ante la Liga por un lapidario 4 a 0. Bieler se destapó con un hattrick y puso en jaque mate las posibilidades de los de Zubeldía que deberán ganar por el mismo resultado para forzar los penales.

La expresión del DT argentino lo dice todo. Hay que meter 5 en Buenos Aires para pasar.

Recién abría los ojos en la cancha, recién se acomodaba el equipo en el estadio Casa Blanca a 2800 metros de altura en la ciudad del campeón de la Libertadores 2008, cuando ya en 7 minutos Lanús caía por 2 a 0. Claudio Bieler, el héroe y participe fundamental del logro de aquél entonces, se destapaba con dos goles de arranque imponiendo su chispa goleadora. Golpe bajo si los hay para el equipo argentino, que ante la desesperación de conseguir el gol de visitante, fue descuidado en la defensa y repetitivo en el ataque. Con un Salvio al que le llegaban todos los pases pero ninguno era fructífero porque el Toto no estuvo prendido en el encuentro. El conjunto de Luís Zubeldía fue ingenuo en el planteo del duelo y pecó de inocente a la hora de marcar y atacar, lo cual se vio plasmado en el resultado. La Liga fue el gran contraste del club argentino, porque tras haber conquistado los dos goles no se tiró atrás, fue amigo de la número 5 y nunca dejó de buscar el tercer tanto. Y el premio iba a llegar a los 26 del primer tiempo, y que una vez más el 9 del combinado que dirige un argentino, Jorge Fossati, se ponía 3 a 0. La frutillita del resultado la iba a colocar Méndez, con un penal de Maxi Velázquez por una supuesta mano que no parece haber sido tal, que tuvo la suerte de ejecutar el segundo penal que le otorgaron a los ecuatorianos y que Bieler cedió gentilmente para que también se pudiera anotar en el marcador. Una derrota que golpea duro, que duele y que afecta en lo anímico al Grana, que no viene haciendo grandes encuentros en la Copa y tampoco en el torneo, pero que puede llegar a dar un verdadero batacazo porque a pesar de la caída en las tierras ecuatorianas, tiene la voluntad tanto el equipo como los componentes del cuerpo técnico el material suficiente para lograr el mismo marcador en el sur del Gran Buenos Aires. Misión imposible, que quizás con un buen marco de público apoyando al Grana, puede darse el topetazo para derribar a un club que viene Ligando la buena suerte hace rato.