Argentina 1 - Brasil 3
¿Decepción? si. ¿Lamento? si. ¿Bronca? Seguramente también. Todo eso siente el hincha tras salir del Gigante de Arroyito. Se sabía que la Selección en las eliminatorias no venía bien, sólo que el triunfo en el amistoso ante Rusia levantó el ánimo en los jugadores y en la gente por lo que se venía. El cambio de estadio en el medio, enormes filas para conseguir una entrada y el fantástico marco que tuvo el estadio de Rosario central quedó en eso, un marco, porque Brasil se encargó de achicarlo de a poco, hasta lograr el silencio casi absoluto en las tribunas. Argentina plantaba un clásico 4-4-2 con las novedades en el fondo: Otamendi y Domínguez en la zaga central. Verón se hacía cargo del juego asociado junto con Messi y Tévez. La selección arrancó presionando y a puro toqueteo muy fructífero porque al minuto iba a tener una Carlitos y se la iban a sacar justo de los pies. La gente se entusiasmaba por semejante arranque. Los laterales brasileros ni siquiera subían, como es característico en ellos. Los tres de adelante estaban sumamente controlados, Kaká tenía siempre dos encima, a Luis Fabiano no le llegaba y Robinho ni parecía estar en el terreno de juego. La hinchada empezó con el "olé olé" ante los pases certeros de la Albiceleste, y eso podía costar caro porque el partido estaba 0 a 0 y no estábamos en condiciones de cargar a nadie. Tuvo dos o tres chances claras antes de los 23 minutos la selección de Diego Maradona, hasta que, llegaría la primera amargura de la noche. Tiro libre que ejecuta Elano desde la derecha, el centro cae a la izquierda del punto penal, Heinze y Otamendi se van con un sólo jugador y aparece Luisao, completamente solo para cambiar al segundo palo con un gran cabezaso y a otra cosa mariposa, el partido estaba 0-1 para la Argentina. Nadie tomó la marca del central carioca y nada pudo hacer Mariano Andújar. Más adelante, a los 30, otro baldazo de agua helada, otra pelota parada, una vez mas Elano patea al arco, la pelota rebota y deriva en la zona izquierda del área donde Kaká saca un centro atrás, cierra un defensor argentino, queda para Maicon que remata, andújar la deja corta y Luis Fabiano la acaricia para que se bese con la red y desata la locura del banco de Dunga. Otra vez la desazón de la bocha detenida, sin ninguna piedad, Brasil llegó dos veces y fue realmente efectivo, dos goles para ellos. Así nos fuimos al descanso, las caras de los hinchas en las tribunas hablaban por todos, una increíble mezcla de sensaciones, inexplicables pero entendibles.
La albiceleste tenía que salir a comerse crudo a la Verdeamarelha, arriesgando de más para poder descontar ante una defensa inquebrantable. Y así fue, ingresó Aguero por Maxi Rodríguez, y Argentina modificó el esquema para seguir atacando, pero sin descuidar los 4 en el fondo, con el miedo escénico a una goleada histórica. Los primeros 20 minutos del complemento fue también plenamente argentino, con mucha movilidad en los de arriba, con sacrificio, con alguna que otra patadita que le dieron a los nuestros, pero con pocas ideas para quebrar una línea de fondo brasilera que fue un verdadero fortín. Y por el minuto 20 llegó el desahogo, la ilusión, la esperanza y la fe, de los pies de Jesús como no podía ser de otra manera. Marcando que desde afuera se podía y clavó un zurdazo inatajable para Julio César, que llegó a rozarla, sin embargo, no pudo desviar el trayecto de gol de la número 5 y el griterío fue enorme, gigante, como el estadio. Y el público se levantó y alentaba, y soñaba, pero Brasil no tardó en despertarnos de una sensación que duró pocos minutos. Pelota que pierde Messi, encaprichado en gambetear cuando no pudo casi en toda la noche, sólo una jugada en el final, Kaká se lleva la pelota y mete un pase en profundidad fantástico para Luis Fabiano, y el 9 le gana en velocidad a Otamendi, y Nico prefiere ir a tapar la valla ante el apuro de Andújar sobre el jugador del Sevilla. Pero el centro-delantero la picó con una clase digna de ver y sentenció e hizo callar nuevamente a todo un país. Golazo de Brasil, historia resuelta, y con el pasaje al Mundial. La decepción en los rostros de los jugadores, marcaban que el camino no fue el correcto. Luego ingresó Milito, que tuvo dos claritas pero Julio César se encargó de ahogar las dos oportunidades. Los aplausos que cayeron en las tribunas fueron para Nico Otamendi, que salvó varias y que tras una muy buena salida ante Luis Fabiano con la pelota en el aire, se ganó la ovación de un estadio que premió el sacrificio de varios. Otro enormemente apaludido fue el autor del único gol nacional, Dátolo, con muchísimo despliegue por la izquierda, y siendo punzante a la hora de decidir que hacer con el balón. La gran ovación de la noche, que puso la piel de gallina a más de uno, fue para Verón. Luego de quitar una pelota cerca de su propia área y salir jugando con ella, se llevó el mejor consuelo de la noche al grito de "¡Olé, olé, olé. olé, Bruja, Bruja!". De Aguero poco y nada, de Messi nada, sigue sin cumplir en la Selección y en los partidos importantes no aparece, Tévez fue el que más luchó, el que más se las ingenió para marcar diferencia y el público también premió su esfuerzo. Fallas enormes en la defensa, sobre todo en los balones quietos. Un Mascherano desconocido que terminó regalándole una pelota sobre el final a un rival, tal vez por la bronca y el malestar que estaría sintiendo. Andújar que salvó un par de ocasiones donde Brasil pudo haber ampliado la diferencia aún más y que no tuvo responsabilidad en los goles.
Queda claro que el equipo de Dunga fue práctico, fue preciso, fue efectivo y fue por sobre todas las cosas un equipo y no un capricho de individualidad. Messi tiene que aprender a jugar en equipo si quiere ser la estrella como es en el Barsa. Ahora a sufrir más que nunca, porque nos espera Paraguay y esperamos que Jesús y Dios nos den una mano.
ARGENTINA: Andújar 5; Zanetti 5, Otamendi 6, Domínguez 4, Heinze 4; Mascherano 4, Verón 7, Dátolo 7, Maxi Rodríguez 4; Messi 4, Tévez 5.
BRASIL: Julio César 7; Maicon 5, Lucio 7, Luisao 7, André Santos 6; Gilberto Silva 6, Felipe Melo 5, Elano 6, Kaká 8; Robinho 4, Luis Fabiano 8.
Árbitro del encuentro: Oscar Ruíz, Colombia.
Estadio: Rosario Central, Santa Fe.
Otros resultados de las Eliminatorias:
Paraguay 1 - Bolivia 0
Chile 2 - Venezuela 2
Perú 1 - Uruguay
Colombia 2 - Ecuador 0
POSICIONES
1. BRASIL 31 Pts.
2. Chile 27
3. Paraguay 27
4. Argentina 22
5. Colombia 20
6. Ecuador 20
7. Uruguay 18
8. Venezuela 18
9. Bolivia 12
10. Perú 10.
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