Les pintó la cara

Las disculpas del ex hombre de Estudiantes.

El Payaso Lugüercio le dio la segunda victoria del semestre a Racing y la primera con Vivas como DT. El ex Pincha la metió frente a su ex club y le posibilitó una victoria que Racing sufrió pero que supo aguantar. Estudiantes se despide antes de lo que se preveía del torneo y ya piensa de lleno en el Mundial de Clubes.La locura de los compañeros por el gol queda contrastada
por el respeto del Payaso a Estudiantes.

Se puso la nariz de Payaso y se burló de su antiguo club, reafirmando la famosa y fomentada por nosotros "Ley del ex". Ese tipo que, siente como partido distinto aquél que disputa contra un club al que ya le prestó servicios y lo juega de otra forma. Hoy, Pablo Lugüercio, para goce de todos los hinchas académicos y para sufrimiento Pincharrata, le dio el gol a Racing para encaminarlo a una nueva victoria. En tanto para Estudiantes es una derrota que termina repercutiendo gravemente en la tabla, porque lo deja casi sin posibilidades de campeonato aunque ya hace rato parece pensar en otra cosa el equipo de Sabella. Parece ya estar arriba del avión con destino a Dubai pero se olvidó que acá había un torneo por jugar, en el que tenía serias chances de pelear hasta el final del mismo. El sueño del Mundial de Clubes pudo más que cualquier otra cosa y se nota. Porque Racing lo manejó con criterio al encuentro y lo fue llevando al terreno de Albil en el inicio. Porque a los 4 minutos del pitazo que daba comienzo a la historia por parte de Pablo Lunati se generó la jugada del único tanto del encuentro. Recibe la pelota en el campo del Pincha, a 10 metros del área y desde ahí saca el derechazo espectacular pegado al poste derecho de De Olivera. Un resultado parcial que fue confirmando la mejoría de Racing con el correr de los minutos, donde mostró superioridad ante el campeón de América. Se notaba en los hinchas la enorme alegría en el gol logrado bien tempranito, que por cierto Lugüercio no festejó, pero ese fana de la Academia presentía que lo iba a sufrir como de costumbre. Y en el segundo tiempo, a los tumbos, se empezó a venir Estudiantes, con el abanderado Verón como iniciador de las acciones de riesgo y con un Boselli que se encargaba sólo de molestar al 1 del local. Un gol de Mauro anulado a instancias del juez asistente por una mano clara del delantero platense hacía volver el alma al cuerpo y a los corazones sufridores por demás de los racinguistas. Sobre la hora se lo perdería Salgueiro, porque allí estuvo De olivera para quedarse con la última pelota del encuentro. Así lograro los de Claudio Vivas una gran victoria que lo hace respirar un bocado de oxígeno de promedio que se engrosa de a poco pero que no debe descuidar.