En el Masters 1000 de París Bercy hay nuevo campeón. Djokovic venció en un gran partido a Gael Monfils para levantar el trofeo. El juego se definió en el set definitivo. De esta manera Nole, después de batallar durante dos y 44 minutos, llega embalado a defender su título de la Copa Master.
Por un lado la alegría: Es el quinto título de la temporada para el mejor imitador del circuito
En la cuidad donde todo parece bello, Novak no quería ser menos y quería cerrar una semana de un nivel de tenis impecable. Todo era perfecto. Por lo menos el primer set y medio. Durante la primera manga el serbio no le dio oportunidad alguna al galo y se quedó con el parcial por 6-2. Al igual que el partido contra Nadal, el entrenado por Vajda demostraba que el saque fue el gran culpable para ganar tan fácil el primer parcial. Tuvo una efectividad del 82% con el primero y 88% con el segundo. Esto quiere decir que con sus dos servicios sólo perdió tres puntos.
Del otro lado de la red notabamos un Monfils sin muchas ganas de levantar y practicamente abatido al ver el juego de su rival. En el comienzo de la segundo chico nada iba a cambiar. El tres del planeta se ubicaba rápidamente 3 a 0 arriba en el marcardor y todo indicaba que ya había campeón sin haber un encuentro disputado. Aunque el serbio se confió y empezo a fallar algunas derechas medianamente sencillas. Gael noto estas irregularidades y de a poco se fue metiendo en el match. Tanto fue así que igualó el tanteador en tres y luego de un set parejo logró llevarselo por 7 a 5. El nuevo mandamás de París se decidia en el último set.
La gente apoyaba a su jugador. Mientras que muchos esperaban que Novak se caiga mentalmente tras tener el trofeo practicamente en sus manos.
Los dos salieron a sacarse los ojos. Y por eso salió un set emotivo. Los dos se quebraron dos veces los servicios. Eso hizo que la paridad llegue hasta el tie break. La emoción cubría las cabeceras del Palacio Omnisports. En los penales la precisión estuvo del lado de Djokovic. Así se convertía en el nuevo campeón de París ganando por 7 a 3 y llevándose de esa manera el parcial decisivo. A falta de una semana para que comience el ATP Finals, donde estarán los ocho mejores, el serbio viene a paso firme ganando los últimos dos campeonatos en los que participo. Hacemos referencia a Basilea y este último Master 1000. Por el otro decepción: El francés estuvo cerca de dar la sorpresa
Del otro lado de la red notabamos un Monfils sin muchas ganas de levantar y practicamente abatido al ver el juego de su rival. En el comienzo de la segundo chico nada iba a cambiar. El tres del planeta se ubicaba rápidamente 3 a 0 arriba en el marcardor y todo indicaba que ya había campeón sin haber un encuentro disputado. Aunque el serbio se confió y empezo a fallar algunas derechas medianamente sencillas. Gael noto estas irregularidades y de a poco se fue metiendo en el match. Tanto fue así que igualó el tanteador en tres y luego de un set parejo logró llevarselo por 7 a 5. El nuevo mandamás de París se decidia en el último set.
La gente apoyaba a su jugador. Mientras que muchos esperaban que Novak se caiga mentalmente tras tener el trofeo practicamente en sus manos.
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