Banfield le ganó el clásico del sur a Lanús por 2 a 0. el equipo de Julio César lo abrió en el segundo tiempo y lo cerró con una joyita de colección de James Rodríguez que se terminó de hacerse amar por la gente del Taladro. El Grana tuvo una tarde más para el olvido.
Para enamorarse bien, siempre hay que ir al sur. Un día antes del día de los enamorados, valía la pena dejarse seducir por como Banfield volvió a demostrarle a Lanús, que no puede ante el Taladro. Por lo menos en los últimos duelos. Y no puede el Grana porque arrancó muy flojo en ambas competiciones. Caso contrario el del equipo de Julio César, que viniendo de jugar por la Libertadores con todos sus hombres más importantes y consiguiendo la victoria ante Morelia, puso nuevamente en los once iniciales a sus ases de espadas. Y claro, estos clásicos no se pueden perder, y mucho menos si son como local. Flamante campeón del torneo pasado, el equipo verdiblanco siguió dando cátedra de su buen fútbol y ganó con cierta comodidad ante Lanús por 2 a 0, que viene de mal en peor, porque no consigue resultados y el funcionamiento no es óptimo. Del conjunto de Zubeldía nada, de Banfield fue un monólogo de llegadas interesantes luego del entretiempo, porque en la primera parte, fueron tibias las aproximaciones de los de Falcioni. Pero, en el complemento, encontraron el camino más profundo para dañar a un Marchesín que venía sacando todo lo que podía. Tuvo un remate en el travesaño de Papelito Fernández, un cabezaso de Ramírez, y algunas situaciones más que hicieron aparecer al 1 Granate. A los 14, llegaría el grito de gol de casi todo un Florencio Sola. Centro al área, varios rebotes, la deja corta Agustín y aprovecha Roberto Battión, el ex Bicho, para decretar el primero del match.
Banfield empezó a manejar los tiempos con la ventaja, y el gran Erviti, amado e idolatrado ya por su gente, se vistió del gran chofer que manejaría los tiempos para llegar al final del partido con la ventaja. Se fue diluyendo el encuentro, y toda la paciencia que si tuvo el local, no la tuvo la visita que vio dos rojas en pocos minutos. A los 27, Gonzalo Castillejos le dio desde atrás a Barraza una patada que le significó la segunda tarjeta amarilla (había sido amonestado pocos minutos antes). Y la segunda de Hernán Grana por un codazo al colombiano James que le dio la posibilidad de irse a las duchas antes de tiempo. La joyita de la tarde, la iba a hacer Rodríguez, en el cuarto minuto de descuento. Una maniobra exquisita que arranca por el cerca de la línea lateral con un taco hacia adentro que deriva en Pío, que había reemplazado ya a Erviti, que descargó rápido hacia el costado nuevamente a Marchant, lo ve picar Julio y adelanta el balón para que james se meta en el área, con pelota dominada y ante la salida de Marchesín, defina por encima de el y con efecto para que baje y se meta en el segundo palo. Extraordinaria jugada, veloz y muy presisa de Banfield que marcó la gran diferencia que hubo entre ambos. El Taladro lo ganó porque supo perforar a su rival, encontró el camino en el segundo tiempo y le regaló a su gente una victoria merecida y buscada. Lanús es un tremendo signo de pregunta que jamás encontró la manera de llegar a lastimar a Lucchetti porque la defensa de Banfield está amurada, amurada a ese fútbol que propone el DT, con un solidez que va desde a trás hacia adelante, y ante la ausencia de Silva, todos se visten de goleadores.
Repasamos resultados de esta cuarta jornada:
Más que Matador, asesino serial
Arsenal 0 - 2 Tigre (Ayala y Luna): El Matador se trajo tres puntos de oro de sarandí venciendo como visitante a un respetable equipo de Burruchaga. La realidad es que los muchachos de Caruso aprovecharon las que tuvieron y los dos mejores hombres hasta aquí del torneo para Tigre, siguen pagando con goles la titularidad. Néstor y el Chino marcaron para que los 3 puntos se vayan para Victoria
Ilusiones pinchadas
Huracán 0 - 0 Godoy Cruz : El Tomba vino a hacer su negocio al palacio Ducó donde Huracán lo buscó por todos los medios, sin ideas brillantes, pero con la convicción de ganar el partido. Tuvo una clarísima en el final del match, pero Balvorín puso la mano luego del remate de Franzoia y debajo del arco igualmente erró el gol y se ligó la amarilla. Godoy lo asedió al final con aproximaciones y tratando de salir un poco de su terreno para bancar el punto que le viene bien y lo sigue teniendo en las principales posiciones del certamen, sin Carranza, expulsado la fecha pasada.
El Negro si puede...
Gimnasia 1 - 0 Racing : El Lobo está. Está y le supo jugar un gran final (por los puntos que necesitan ambos para zafar de promoción y descenso), en la que buscó ser el protagonista y lo fue por gran parte del partido. El esquema con tres puntas de la Academia no surtió demasiado efecto ni Castromán como el armador del equipo. siempre es rescatable el sacrificio de Lugüercio pero a veces no basta con la entrega. En el primer período, llegó la única alegría de la noche, con un centro que vino desde la derecha, Ayala rechaza y la deja corta, para que Stracqualursi, se lleve la pelota hacia un costado del área chica meta el buscapié al medio y Marco Pérez le gane a Cahais para empujarla y clavar el 1 a 0. Una victoria que el Tripero sostuvo a pura garra, entrega y algo de buen fútbol. Racing no encontró soluciones a los problemas defensivos y mucho menos a la ineficacia en el ataque, con tres puntas que no "pincharon" ni cortaron.
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