6 de diciembre de 2009

¡Esta copa es mía!

Ayer en Barcelona, España gritó bicampeón tras vencer por un contundente 3 a 0 a los checos. Ferrer y Nadal habían dado el viernes los dos primeros puntos, y ayer, Feliciano López y Verdasco (¿te acordás?) se llevaron el dobles en sets corridos y desataron la alegría de la segunda Ensaladera consecutiva.¡Otra vez es para nosotros!. Celebración entre López y Verdasco.

El viernes luchó pero se quedó con los dos puntos del singles la Armada. En primer turno, Rafa Nadal le ganó a Tomas Berdych por 7-5 (tras levantar el manacorí un 4-5 en contra y un 0-30 con su saque), 6-0 y 6-2, para dejarle la tranquilidad a Ferrer de que el primer punto estaba en casa. Cabe destacar que la final se jugó en el Palau Sant Jordi, con una capacidad para 16.000 espectadores que vibraron en esta definición y por supuesto que la superficie elegida fue polvo de ladrillo, la más cómoda para los españoles (aunque en cemento nos ganaron en la final del año pasado) y la más dificultosa para los checos. En el segundo singles del viernes, David Ferrer venció luchándola hasta el final a Radek Stepanek por 1-6, 2-6, 6-4, 6-4 y 8-6. Impresionante la remontada que pudo realizar David, que llenó de esperanza los corazones españoles con una alegría cada vez más cercana.Y en el dobles, saltaban a la cancha Verdasco y López, esa pareja que supo ganar en Argentina en carpeta dura en la ciudad de Mar del Plata y arrebatar un punto clave en esa serie de 2008. El entrenador checo había puesto en el dobles para el sorteo a Lukas Douhly (uno de los mejores doblistas del circuito, top ten del ranking junto a Paes) y Jan Hajek, pero finalmente fueron Berdych y la "cobra" Stepanek los que salieron a la cancha a disputar ese tercer punto que debían ganar como sea.
España no dio chances. Con un Verdasco y un López dispuestos a hacer historia una vez más, vencieron en sets corridos a los checos por 7-6 (9 a 7 en el tie break), 7-5 y 6-2.
Por segundo año consecutivo, la Armada española consigue quedarse con la Ensaladera y consolidarse con un equipo que es de temer, porque tiene cuatro jugadores tremendos que pueden jugar en singles o en dobles sin problemas. República Checa apostó al manotazo de ahogado con sus dos ases de espada, pero eso no alcanzó.¡Viva España! Gritan hoy por las calles de todo el país porque el tenis les dio una nueva alegría.


Galería de la gran final:

Imágen fantástica del marco que había ayer en el dobles.

Verdasco parece tirar el drop al lado de Stepanek.

Con el pecho y algo más España se quedó con la Ensaladera.

Montaña de alegría se vive tras vencer a los checos.

El capitán mimado. Albert Costa alabado por todos sus dirigidos y el cuerpo técnico español.

Ya que estamos, arriba el Mosquito para homenajearlo por su trayectoria y por el aguante.

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