Esta novela te la Conté: Otra vez la rompió Facu. Animal.
El voley crece y crece. Su juego también. Van de la mano. Argentina está dando pasos firmes y precisos. Contundentes y sorprendentes. Sólidos y esperanzadores. Para el futuro y para el presente.
Argentina ya había dejado en el camino en la primera rueda a un desdibujado Venezuela (3-0), a un tibio México (3-1) y había caído dignamente ante el actual campeón olímpico, Estados Unidos (1-3).
En la ronda dos, en un triangular con los japoneses y con los franceses, el seleccionado nacional derrotó hoy a este último combinado por 3-1, en una estupenda noche (en Italia) de Facu Conte, más los aportes necesarios y vitales también de Pablo Crer y Sebas Solé. Los parciales se dieron de la siguiente manera: 16-25 quedó para los galos, en un set para el olvidó con un gran apabullamiento por parte de los europeos. El elenco de Webber reaccionó, se vio tocado en el orgullo, y fue en busca de la remontada. Segundo chico: 25-17, esta vez del lado nacional, con un gran parcial de Crer y de Solé que terminaron por motivar a todo el resto del equipo. Tercer juego: 25-23, ajustado. Sin embargo, esa cuota de emoción y de definición dura, dieron a Argentina el envión final para afianzarse del todo en el match. El cuarto: fue show de bloqueos y aporte titánico de Facu, el hijo del gran Hugo Conte, presente en el estadio cabe decirlo, al igual que el Cuchu Cambiasso y el Pupi Zanetti. De esta forma el seleccionado argentino se quedó con el partido y ya se abrió el camino para llegar a tercera fase (van 12/18 equipos, los dos primeros de cada triangular). Luego de esta segunda fase donde hay 6 tríos, se vienen otros 4 tercetos con los clasificados. De allí, los primeros de cada zona, van a semifinales. Un camino bravo, largo e intenso.
Dijeron presente: Pupi y el Cuchu aplaudiendo al equipo.
Argentina tiene que ir como hasta ahora, dando los pasos de a poco, con un elenco joven y que se juega la vida por estos colores, por querer crecer y escalar lo más alto posible en este camino en Italia. El sábado será el turno de mirarse las caras con los asiáticos, en un duelo complicado porque se sabe el poderío defensivo de este tipo de planteles. La escasez de recursos ofensivos de los japoneses puede ser la variante favorable para nuestro seleccionado, y allí empezar a sacar diferencias en el marcador.
El mundial de Italia le está siendo favorable al equipo de Webber. Hay un proyecto tan interesante como potencial. Pibes con hambre, de gloria, de ganas de ganar, con sueños, con convicciones, con unión y fuerza para comerse crudo a quien se le venga. Por ahora, todo marcha sobre ruedas...
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