Y un día... volvió El Legendario

Y volvió de la mejor manera. El cambio en el cuadro principal reemplazando a Rafa Nadal no lo favoreció para nada al argentino, para la Torre de Tandil. Hoy cayó ante Hewitt por 6-3, 7-5 y 7-5. Lleyton jugó los dos primeros parciales de gran forma, como en esos tiempos donde fue campeón en La Catedral y tuvo el número 1 en su pecho. Aprovechó la única chance de quebrar el servicio que Juan Martín le permitió para llevarse el set por 6-3. En ese parcial, Delpo tuvo 6 ocasiones para romper el saque de Hewitt, no concretó ninguna. Ya en el segundo, el juego fue un poco más equilibrado, pero el 5 del Planeta seguía muy incómodo con el partido que proponía el australiano, puntos cortos, golpes efectivos y tiros ganadores, aberturas para que Del Potro se mueva y se obligue, lo que generó varios resbalones del argentino por tratar de llegar. El set se definió en el quiebre por parte de Lleyton al saque de Delpo en el 5 iguales y se lo alzó con un 7-5. En la tercera manga del partido, El Rubio de la tierra de los canguros arrancó quebrando el servicio del Gigante y sacó ventaja de 2-0. Esa ventaja recién se pudo achicar igualando en 5 y quebrandole por primera vez en el partido al ex número 1 del mundo. Pero enseguida iba a caer el saque de Juan y le posibilitó a Hewitt servir para partido y fue el final de la historia. Sensaciones encontradas para Del Potro que pierde un partido en sets corridos ante un jugador que volvió a ser lo que fue, su ídolo y un grande del tenis. Para Lleyton la gran satisfacción de volver a ganarle a un top 7, ya que no lo hacía desde el 2007, sin contar la exhibición hace dos semanas con Nadal. Pasó la ilusión de Juan Martín, que hoy no estuvo ni al 50% de sus posibilidades y que supo aprovechar el abanderado de Australia.