Messi y un capítulo más. Notable y determinante. Rebelde con causa. Selección al Mundial: todo es celebración por un gigante como él.
No sabemos cuánto falta... y tampoco quiero saberlo. Un día Messi le dirá adiós al fútbol y vos te vas a arrepentir de no haber sido un espectador positivo de sus andanzas con la camiseta nacional.Lionel cargó con la responsabilidad de un 0-1 en el último partido de las Eliminatorias, a 80 y tantos minutos de quedarse sin nada, perdiéndolo como se suele decir... "desde el vestuario". La altura: poco importó. La marca escalonada: supo sortearla. Los socios: los encontró. Ángel Di María y Enzo Pérez, en mayor medida; Lucas Biglia y Eduardo Salvio, en menor medida, fueron los acompañantes de la primera guitarra y voz cantante albiceleste.
Con esa obligación a cuestas, el 10 marcó tres goles. Esos tres goles fueron un motivo más para quererlo eternamente. Máximo goleador histórico de las Eliminatorias junto a Luis Suárez (21 gritos) y el artillero más grande de la vida del Seleccionado.
Messi, ése pibe con problemas para crecer, nos demuestra su grandeza en cada paso. Rusia 2018 necesitaba de Lionel. Y no tengan dudas de que Lionel se moría por estar en Rusia. Será el tercer mundial -cuarto- del capitán con la 10 en su espalda.
A veces me pregunto si nos merecemos a Messi como estandarte de nuestros colores... A veces reflexiono y digo: ¿qué hicimos bien para que Lionel nos elija, o que opte por Argentina y no por España? Tal vez no le demos ni el más mínimo motivo para elegirnos... No obstante, su amor por este país supera todo. Incluso los reveses que la vida le ha dado.
Tal vez podamos comprender a La Pulga desde la canción "NUNCA QUISE TANTO A NADIE COMO VOS...", porque jamás Messi quiso a nadie como a esta camiseta. Porque jamás yo quise a ningún jugador como lo quiero y admiro a él. Y si de amor se trata, vayamos juntos de la mano a Rusia.