18 de diciembre de 2011

Fiesta de fin de año

Exhibición Blaugrana para una consagración cantada. Barcelona liquidó en el primer tiempo el trámite de la final y se encargó de controlarlo, buscar el cuarto gol y encontrarlo en cuanto se lo propuso. Paliza al Santos 4-0 y campeón del Mundial de Clubes en Japón.

Por: Leandro Scaviolo
Al compás de un buen flamenco, de un buen tango, de un buen rock and roll, o como quieran. Barcelona baila y hace bailar al público. Los rivales, suelen ser "bailados". Si cada vez que hay un pase, es un comienzo de una pieza intachable, llena de armonías con la pelota. Si cada vez que Messi toma el balón, el OH! de la gente es un coro de ángeles que se hizo cita en Yokohama (esta vez). Si en cada ritmo el Barcelona se las arregla siempre para bailar y ganarse a la mejor mujer de la noche (la copa). Si cuando quiere, es sereno, cauteloso, prolijo y sensato. Pero cuándo tiene que lograr la conquista multitudinaria es desfachatado, ambicioso, virtuoso, poderoso. Simplemente fantástico.

Hablar del partido es como hablar de un recital en donde un sólo protagonista suele llevarse las ovaciones. este duelo sudamericano-europeo también calcó esa situación. La voz líder en los pies de Messi, la fortaleza en la batería de Dani Alves, la sutil melodía lanzada desde el bajo de Iniesta, la particular precisión en la guitarra de Xavi, y un conjunto que acompaña con lo que sea, una danza interminable para bailarla hasta el final.



Santos fue ese espectador que debe romperse las manos para admirar lo que vio enfrente de sus propias narices. Porque cuando se quiso acordar, estaba en la final, y ya caía 3-0 al cabo de los primeros 45 minutos de carnaval futbolero. Messi, llevando su voz (pié) a lo más extremo de los agudos para concretar el primer gran grito. Xavi, ajustando su instrumento con una precisión admirable. Y culminó Fábregas, otro que en la banda no pasa desapercibido nunca, sólo colocándola al lado de un poste para salir a celebrar.

El conjunto blanco sólo tuvo una ocasión y allí estuvo el representante de esta banda, el manager, el que maneja todo desde el fondo, el gran Víctor Valdés. El complemento tendría más participación del guardameta del gran Pep, pero fue porque los ritmos fueron variando en el recital blaugrana. El Barça se fue adecuando a lo que fue generando. Punzante cuando se le antojó, luego dividió dominio del balón con el Santos, y allí, Borges, Ganso y alguna llegadita de Neymar pusieron en atención a los guardianes de la meta. Pero no mucho más.

Para el final, lo venía buscando Dani Alvés a ese gol que lo llevara a redondear una noche majestuosa a nivel personal. Pero jamás egoísta, cedió un pase-gol a Messi, cara a cara en el centro del área con Rafael, y Lionel resolvió de manera extraordinaria, ya que pocos jugadores pueden eludir y dejar en ridículo como hoy lo hizo el crack mundial. Y luego tirar la pelota para el beso número 53 en el año para La Pulga, que es tan gigante.

Todo lo que se diga de esta banda comandada desde las afueras por un hombre que la maneja desde las sombras, que nunca se adjudica los éxitos como propios, que tiene un compromiso de corazón a corazón con el club que tanto quiere, que promulga las banderas del sacrificio, la solidaridad en cancha, y tratar a la pelota como nunca antes la han tratado. Respeto por el juego, solvencia, creencia en lo que se quiere y se puede lograr, la Banda de Guardiola hoy más que nunca es el fiel reflejo de un fútbol único, que no sabe de nombres propios, porque por más que resaltemos a unos cuantos, el resto es realmente un enlace homogéneo en la consagración colectiva. El claro ejemplo es cómo finaliza jugando el Barça el encuentro. Con una línea de tres hombres integrada por Mascherano como stopper derecho, Fontás de líbero y Abidal el stopper izquierdo. Una cosa que sólo se puede hacer en un equipo así.

La soberbia presencia de Puyol, la seguridad de Valdés, el temple de Abidal, la prestancia de Piqué, el sacrificio de Busquets (enorme), el inteligente Iniesta, el sutil y lujoso Xavi, el maravilloso Messi, el impecable Fábregas y hoy el voluntarioso y picante Thiago, conformaron un sistema que nadie notó que faltaba Alexis, que nadie supo de la lesión de Villa, y que a nadie le hizo falta tenerlos en cancha porque la banda sigue tocando, al compás de sus propios pies y por el bien del fútbol. Lo dijo Neymar, quién estuvo lejos de brillar en el encuentro: "Hoy aprendimos a jugar al fútbol", la enorme promesa brasilera tuvo la coherencia y la sinceridad para decir lo que pensaba. Valorable 100%.

"El Barcelona es arte, es música para nuestros ojos y
nuevamente es campeón de este Mundial de Clubes."

TOP 3 DE LA FINAL: MESSI, DANI ALVES y XAVI.

PREMIACIÓN DEL MUNDIAL DE CLUBES 2011

CAMPEÓN Barcelona (ESP)
SUB-CAMPEÓN Santos (BRA)
TERCER PUESTO Al Sadd (QAT)

PREMIO FAIR PLAY Barcelona

BALÓN DE ORO Messi (Barcelona)
BALÓN DE PLATA Xavi (Barcelona)
BALÓN DE BRONCE Neymar (Santos)




Fotografías: http://marca.com y http://fifa.com  //

10 de diciembre de 2011

Planeta Barcelona

Dio vuelta un encuentro que le fue adverso desde el túnel. El Barça es dueño de un nuevo Derby, en el Bernabéu, por 3-1 con una cátedra de cómo reponerse ante la adversidad, llevar adelante el partido, y golear al Madrid en sus propias narices.


Tiene al Mundo a sus pies. Es un Universo paralelo que respira fútbol. Una historia que hace años comenzó y que es de nunca acabar. Barcelona se quedó con total autoridad con la sonrisa plena en un nuevo clásico de la Liga de las Estrellas. El Real Madrid fue un cúmulo de intentos individuales que jamás fueron enlazados.

La fortuna comenzó dándole un guiño en el destino del Merengue. Mala salida desde abajo tras pase de Puyol de Víctor Valdés, que derivó en los pies de Di María, sesión fallida al centro del área, remate de Özil desde afuera, rebote en Busquets, y definición de bolea de Benzema para que la catarata de errores en la jugada derivara en gol. Sólo 22 segundos bastaron para que las gargantas del Bernabéu gritaran bien fuerte un desahogo contenido por varios meses. El equipo de Mou arrancaba las acciones de este partido de inmejorable manera. El local se dispuso a presionar la salida blaugrana, aún mas de lo que lo tenían pensado tras esa fallida salida del arquero catalán. Sin embargo, el Barça jamás dejaría de lado su filosofía de juego, su ADN emparentado directamente con el cuidado de la pelota. Y por ese camino siguió transitando y Victor siguió jugándola por bajo para que nadie sospechara de un bajón anímico del guardameta.

Los minutos fueron corriendo, y tras algunas imprecisiones marcadas en los pases del Barcelona y levantar el pié del acelerador por parte del Madrid, Messi tuvo una chance inmejorable tras otro yerro, esta vez de Ramos para que Casillas se luciera con una tapada al raz del suelo. El Barça de Pep insistía en encontrar los caminos pero se le hacía difícil, hasta que Lionel Messi encontró la llave para abrir la portería de Casillas. Porque decidió él desde la cancha mandar a Alexis Sánchez entre los centrales, dejar que Dani Alves suba por ese andarivel y el 10 arrancar un poco más atrás. Tremenda jugada de La Pulga, del Hombre que nació con la pelota en los pies, y difícilmente se la puedan quitar. Messi hizo una maniobra talentosa, como marca su genética, como lo siente cada argentino, un verdadero distinto de este deporte. Pase milimétrico para el Niño Maravilla entre Pepe y Ramos y una definición cruzada digna de enmarcar. Gol de otro Planeta, golazo en el Bernabéu para el empate.

Para el Real, el cronómetro marcaba los 30 de juego, esa fue la resistencia que pudo ofrecer. Luego, a pesar de que el Merengue tuvo llegadas, pocas veces salió de contraataque. Muchísima voluntad en Di María, el más claro fue Mesut Özil, en un escaso primer tiempo desde lo futbolítico y creativo para el equipo blanco, y poco más para destacar. En Messi nació el empate y allí también se crearon dos criaturas que crecieron a pasos agigantados en el partido. Uno de ellos, el Cerebro; el otro, el Guardián, el Soldado número uno de este conjunto de Guardiola. Iniesta y Puyol hicieron un partidazo en todos los aspectos, y fueron de menos a muchísimo en esos 90 minutos de juego.

La primera etapa se iba con la sensación de que el Madrid había llegado un poco más, pero el Barça fue efectivo en dos chances netas que tuvo: un gol y parda en el marcador.

El complemento nos traería toda una cuota de incertidumbre de cómo lo llevarían a cabo ambos. Real Madrid no supo contrarrestar ese juego asociado tan aceitado en Barcelona, tanto que los debe aburrir tratando de encontrar soluciones a los problemas que generaban estos temibles 11. Y es que el Mundo paró para mirarlos adentro de la cancha, es que el Planeta se quiere regodear de fútbol. Y por ese camino, emprendió el Barcelona el principio de un inobjetable triunfo. Más allá de lo que pudo hacer el Merengue, los de Guardiola administraron el juego, las situaciones, los pases y los tiempos de un complemento que marcó a fuego las realidades de los equipos. Cuánto que le falta al Madrid para ser como el Barcelona, y cuánto que le sobra al Barça para no ser como el Merengue.

La fortuna devolvió gentilezas y Xavi anotó con desvío clarísimo en Marcelo para que Casillas no llegue nunca. 1-2 el derby. Se le quemaban los papeles a Mourinho. Messi con destellos de magia, Iniesta con una mente brillante, Alexis picante, Dani Alves jugando a lo puntero derecho, metiendo un centro memorable para la llegada de Cesc Fabregas y cabezaso a contrapierna del uno Merengue. 1-3 y a Mourinho se le derritió el partido en la fría noche de Madrid. Kaká ingresó por el mejor de los blancos: Özil. Tuvo la voluntad de crear el brasilero pero jamás estuvo acompañado. Higuaín y Khedira entraron por diferentes urgencias. El primero para marcar algún gol que descuente la historia y el segundo, para que las amarillas en cancha no se transformen en rojas (reemplazaron a Di María y Lass respectivamente).

Lo tuvo Cristiano Ronaldo en su cabeza el descuento, se fue muy cerca del palo derecho de Valdés. Un CR7 que no estuvo a la altura de las circunstancias, como suele pasarle. Más pendiente de sus individualidades que de hacer crecer a un Madrid que había arrancado de inmejorable modo el encuentro. Nunca parece entender Ronaldo que en estos partidos se gana por la fortaleza de un equipo. Kaká también pudo conectar de zurda pero respondió Victor, quién se asentuó con el correr de los minutos.

Los 15/20 finales estuvieron completamente de más. Barcelona manejó con criterio, coraje, seguridad y solidaridad lo que quedó del encuentro para no llevarse ningún chasco antes del pitazo final. Llegó el mismo y todo fue celebración para los de Pep, que supieron dar vuelta una historia que a cualquier equipo le hubiese complicado la vida, al Barça parece simplificársela.

Barcelona lo ganó por destreza colectiva, eso describe lo que significó el partido. Se va al Mundial de Clubes con el mejor envión anímico que podía haber tenido. ¡Cuánto fútbol nos dás Barcelona! Y no es sólo por el fantástico Messi, sino además por 10 guerreros tremendos que jamás dejan sus principios futboleros de lado. Barcelona es lo que el Mundo quiere ver dentro de una cancha, y hoy nuevamente se adueñó de los ojos del Planeta.
FICHA DEL PARTIDO

Barcelona 3 (Sánchez, Xavi y Fábregas)

Valdés 6; Dani Alves 7, PUYOL 9, Piqué 7, Abidal 4; Xavi 6, Busquets 6, Iniesta 9; Fabregas 6, Messi 7, Sánchez 7. DT: Josep Guardiola.

Cambios:
Keitá por Fábregas
Villa por Sánchez
Pedro por Iniesta

Amonestados: Messi, Alexis Sánchez y Piqué

Real Madrid 1 (Benzema)

Casillas 5; Coentrao 5, Ramos 4, Pepe 4, Marcelo 6; Xabi Alonso 5, Lassana Diarra 5; Di María 6, Özil 7, Cristiano Ronaldo 4; Karim Benzema 6. DT: José Mourinho.

Cambios:
Kaká por Özil
Khedira por Lass
Higuaín por Di María

Amonestados: Pepe, Sergio Ramos, Xabi Alonso y Lassana Diarra.

CALIFIACIÓN DEL PARTIDO: 9



1Barcelona37
2R. Madrid*37
3Valencia*30
4Levante*29
5Sevilla*24
6Málaga*23
7Osasuna*21
8Atlético*19
9Athletic*18
10Espanyol*17
11Rayo*16
12Granada*16
13Betis*16
14R. Sociedad*15
15Mallorca*15
16Villarreal*14
17Getafe*13
18Racing*12
19Sporting*12
20Zaragoza*10

4 de diciembre de 2011

NADAL ES PARA SIEMPRE

España consiguió su pentacampeonato en Copa Davis tras ganar el cuarto poroto de la serie en 4 sets. El victimario: Rafael Nadal. La víctima: Juan Martín Del Potro. En un partido épico, ambos dejaron el alma, pero la Ensaladera va para la paella española. Pronto habrá revancha, una vez más.

SERIE: ESPAÑA 3 ARGENTINA 1 (España campeón)
CUARTO PUNTO: Rafael Nadal (ESP) a Juan Martín Del Potro (ARG) 1-6, 6-4, 6-1 y 7-6(0).

No es la foto esperada, pero quién puede decir que no son grandes campeones.

Que si David jugaba el viernes, ¿Cómo llegaría al domingo? Que si Delpo vencía a David Ferrer el viernes... Todas las especulaciones posibles son viables y respetables, pero ya está. La serie se jugó, terminó y no hay nada para reprocharse. España es nuevamente campeón de la Davis. Si Nadal le ganó a Monaco, fue porque lo paseó tenísticamente. Si Ferrer le ganó a Del Potro fue porque esa noche española de viernes fue la mejor de su basta carrera. Si el dobles argentino pulverizó a los españoles, fue simplemente porque estuvieron Nalbandián y Schwank para decretarlo con autoridad. Si la Torre de Tandil no pudo con Rafa, sencillamente porque enfrentó al enorme, interminable y talentoso Rafa.

En cualquier otro escenario, bajo cualquier otra circunstancia, superficie, rival y final, el partido de Juan Martín de hoy es para la consagración. Y sin dudas que hoy lo consagra, pero no con el trofeo en la mano. Una grandiosa muestra de actitud, de resucitación, de volver a respirar en un partido no apto para fumadores empedernidos, Delpo encontró luces en su tenis, e iluminado un camino que se había hecho tan cuesta arriba como el Everest desde la mismísima base.

Después de un arranque digno de refregarse los ojos, porque Juan Martín capitalizó todas las dudas del manacorí, administrando con una potencia descomunal cada punto, jugando profundo, abierto y certero, se lo llevó 6-1 y lo castigó a gusto y piacere a Rafael, nadie creería lo que vendría después. Porque de no ganar ni un sólo game con su saque (el único lo había obtenido quebrándole a la Torre en el primer game del match), pasó a la transformación de Rafa. Porque Delpo estuvo 1-0, 40-0 con su servicio en el segundo parcial, lo que hubiese marcado un segundo set indefectiblemente para él, por mantener el ritmo de juego, intenso, durísimo, con golpes con una precisión que daban miedo, a un escenario desolador. Nadal recuperó la ruptura, conservó su juego de saque, y le cambió la perspectiva a Del Potro. En un set que fueron palo a palo, con una merma de Juan y un crecimiento notorio del español, llegaron al 10º game con el servicio del argentino que no pudo ser administrado por él de buena forma. Nadal consolidó toda la mejoría vista en los juegos anteriores y con un 6-4 que lo trajo a Sevilla a jugar el cuarto punto.

Una vez enterado del inicio del match para Rafa en ese segundop set, no aflojó. Y a Del Potro el solo hecho de pensar que ya el partido se trasladaba indefectiblemente a jugar como mínimo 4 parciales era toda una preocupación. Nadal sacó el mejor repertorio guardado, destrozando al 11º del ranking tanto como él lo había hecho para con su persona en el primer set, y devolvió las gentilezas: 6-1 para España, y la desilución absoluta para todo el equipo argentino por el contraste oscuro que había tomado el partido en sí.

Con un 2-0 y servicio en el 4º parcial, las esperanzas estaban casi desechadas por todos, los argentinos en Sevilla y nosotros desde Baires cruzando los dedos. Pero, Juan nos tendría guardado una enorme entrega física y espiritual, generada por la mismísima hinchada que lo hizo erizarse y llegar a las lágrimas en medio de su game de servicio. Delpo concretó el 1-2 y nació el partido para él con un quiebre resucitador para igualar el score. No está muerto quién pelea, y mucho menos el que batalla. El banco argentino se animó a cantar, a saltar y a alentar tanto como en el primer set. Sin embargo, otra vez el saque fallaría con errores propios de Juan en las ejecuciones y otra vez abajo: 2-3. A partir de ahí, Delpo hilvanó 3 games al hilo, dos con el saque del español y uno con el propio para reestructurar una historia que parecía ya tener el final feliz rojo y amarillo.

Dispuso de se servicio JM para cerrar el 4º parcial y trasladar el encuentro a un final de película en La Cartuja. Pero nuevamente no pudo Delpo, en discontinuidad con la intensidad de su derecha y Rafa renacía en el set. 5-6 quedó increíblemente el argentino después de haber sacado él dos games de diferencia. Nadal sacaba para Copa Davis, nada más y nada menos. Pero a él también le pesó. Y Delpo quebró impresionantemente y forzó el tiebreak. Y allí, entre yerros de la propia Torre de Tandil y aciertos de Rafa, la historia se cerró con un 7-6(0), con una derecha (zurda) notable de Nadal a la paralela.

Ahí se acabó la ilusión. Delpo estuvo cerca en varios tramos del encuentro de haberlo hecho mas acotado al encuentro o alargarlo en un quinto y definitivo. Pero no se le dio así, el destino y el tenis de Nadal no lo quiso. Un hombre que ha hecho vibrar hasta el cansancio a 28000 españoles con su tenis y con su "espectáculo" en cada celebración.
Lo de la gente argentina en el estadio fue conmovedor. Una mención especial al público español que ovacionó a Juan Martín Del Potro post partido. La Torre hizo creer a 40 millones que era posible, que estaba al alcance de la mano. Dio una grata muestra de caracter, de hombría, de amor propio, de lucha, de hambre, de honor y de actitud que jamás se olvidará. Porque es un pibe de 23 años que se ha hecho grande con cada paso en su carrera. Porque es una bestia del circuito mundial y es argentino. Bendición del Tenis sos Juan Martín, y no me quedan dudas que estarás en lo más alto de esa cúspide mundial de la raqueta. Aplauso para ese dobles nacional que nos abrió la esperanza a un domingo con ilusiones, aplauso para un Tito Vázquez que siente el tenis como pocos, que juntó a los mejores que tenemos para soñar con algo que tarde o temprano se nos va a dar.

Se acabó el sueño en España, pero si hay algo que no se acaba es el orgullo por este equipo. Enfrente estuvieron los extraterrestres del Circuito actual. Y más allá de eso, nosotros tuvimos con qué. Gracias Legión, millones de gracias. El año que viene empezará otro camino en tierras alemanas, y esperemos que esa sí sea, la Davis tan esperada... La que todos queremos tener.

3 de diciembre de 2011

TIEMPO DE DESCUENTO

Eduardo Schwank y David Nalbandián se impusieron con total autoridad sobre la pareja española de Feliciano López y Verdasco, llevando la final al cuarto punto al menos, entre Nadal y Del Potro. El elenco argentino suma su primer poroto y buscará desde las 9 del domingo llegar al quinto en esta final en Sevilla de Copa Davis.

DOBLES: D.Nalbandián/E.Schwank (ARG) a F.López/F.Verdasco (ESP) 6-4, 6-2 y 6-3

Se dió lo lógico. Sí, es sabido que esta misma pareja española nos pasó el trapo en la Ciudad Feliz en 2008. Pero también es cierto que a la dupla europea le pesó el poder cerrar la serie. Y a su vez, a este Nalbandián pleno, acompañado por un Schwank certero, relajado, les hubiese sido muy complejo cerrarla aún con la mejor versión de los zurdos.

Porque desde el primer momento plantó bandera Argentina. ¿Quién dijo que todo está perdido? Estos dos bestias del tenis de parejas vinieron a ofrecer su corazón, y algo más también. De principio a fin fue contundente lo de la dupla elegida por Tito Vázquez, ya que supieron complementarse como si hubieran jugado toda la vida, y tan sólo habían compartido un certamen en el año 2008 casualmente. Tres años después, pocas cosas han quedado de ese Feliciano López héroe que hoy se hayan visto. El de Mar del Plata fue apabullador, temido por todos. El de hoy tuvo miedo hasta de su sombra. Ni hablar de un Verdasco tribunero que ante la adversidad, quiso demostrar lo sanguíneo que es arengando a 28000 españoles para poder corregir todo lo que ellos estaban haciendo mal. El golpe anímico no surtió efecto, más allá de algún sobresalto nacional salvando oportunidades de quiebre en el último parcial.
De abrir el partido con el saque sin fisuras, pasó a ser el más débil de todos Feliciano López con sus ejecuciones de servicio. Quebró Argentina en el quinto game y sostuvo diferencias para cerrarlo en 6-4. Eduardo metido en el partido, David de menor a perfecto (el mayor le queda chico), el dúo nacional se fue consolidando con la confianza de sus golpes, sumado a la incertidumbre constante ofertada del otro lado de la red.

 El segundo parcial fue aún más favorable a los conducidos por Modesto. Porque lograron romper con ambos servicios, trasladándose velozmente a un 4-0 inobjetable. Que nuevamente fue sostenida y sellada con un 6-2 que marcaba a fuego el destino del partido. Que al equipo argentino se le escapara este partido, era realmente imposible. Por lo que ofrecieron los dos equipos en cancha.

Sin embargo, en el tercero fue donde más firme tuvo que estar Argentina para no morder la manzana podrida, esa que podía desencadenar en un envión anímico español que no convenía. Porque el equipo nacional estaba cómodamente adelante por dos sets y con break a favor nuevamente, pero surgieron chances de ruptura en el sexto game, y apareció el mejor Nalbandián para desecharlas con rapidez, sin dejar envalentonar a nadie.

Tras esa chance no concretada por España, sólo hubo que esperar un final anunciado, bien trabajado por Eduardo y David, ante un Feliciano que pareció no estar acompañado nunca, y un Fernando que se creyó que lo anímico podía pesar ante lo tenístico. Pero no fue así. 6-3 lo cerró Argentina con un nuevo quiebre, para no dejar dudas, para demostrar que la serie sigue viva, y para que la gente lo celebre en las tribunas de La Cartuja. Lo del público argentino fue conmovedor, desde el primer game al último. Siendo capaces de enmudecer a los miles de españoles reunidos para ver (incluso la realeza), un 3-0 que nunca estuvo cerca de concretarse.

David Nalbandián se cargó con toda la presión y permitió que Eduardo juegue suelto, arriesgando, siendo picante. El unquillense en tanto, se dio varios lujos con las devoluciones tremendas a las que nos tiene acostumbrados, control total en la zona de la red y la decisión justa siempre en el momento adecuado. El mal partido que han jugado los españoles no implica que sean una mala pareja, sí que tienen estos bajones y hoy no les salió nada. No por eso hay que dejar de valorar el enorme triunfo que se consiguió.

Mañana... qué complejo será mañana. A partir de las 09.00 jugarán Rafa Nadal y Del Potro en un partidazo a priori para cualquier espectador ajeno a esta serie de esta final. Lo cierto es que el español puede consagrar a España una vez mas, en casa, poniéndole él mismo la rúbrica a esta definición. Juan Martín deberá olvidarse que ese enorme partido que jugó el viernes lo perdió ante un inmejorable Ferrer, y quedarse con lo que dejó en la cancha. Eso puede bastar para traerle un gran dolor de cabeza a Nadal, que llega entero, fresco por haber jugado poco, pero la Torre de Tandil deberá ponerle las fichas a su saque, a terminar los puntos rápido y a producir él un desgaste sobra la humanidad de Rafa. De esa manera y adjudicándose de una sólida manera el primer set de ese cuarto punto, al español nada le cerrará. Será muy difícil para él tener que sacar el encuentro adelante. Pero para eso, tienen que darse estos atenuantes mencionados. Que Delpo ingrese con una mentalidad arrolladora, para que el Toro se ponga embravecido y se pierda en su propia adrenalina.


Mañana será una nueva historia de esta final, que será histórica para nuestro país pase lo que pase. Porque el Mundo entero de la raqueta la está mirando. Y ahí, en Sevilla, sólo están España y Argentina. Ojalá que las tapas de los diarios del lunes, nos muestren almorzando con ENSALADERA. No está dicha la última palabra, mucho menos terminada esta serie. Quedan dos más, hay que ganarlos a los dos, y esta vez, no hay margen de equivocación. Será cuestión de afinar la puntería, de soltar la raqueta y pegarle duro.


2 de diciembre de 2011

ESFORZARSE EL DOBLE

David Ferrer fue el as de basto que España precisaba para ponerse 2-0 y cumplió. Batalló hasta por encima de sus mejores versiones y le arrebató el 1-1 a Del Potro en cinco parciales. Antes, Rafael Nadal limpió la pista
y aprovechó en esa barrida para cargarse a Monaco.

FINAL DE COPA DAVIS: España 2 Argentina 0

El primer punto de esta serie de la final de la Copa Davis en Sevilla, en La Cartuja española fue 6-1, 6-1 y 6-2, en una exhibición de cómo afrontar un compromiso semejante del ex número 1 del Planeta y actual escolta de Novak Djokovic. La referencia es para el hombre que todo lo puede, desde lo físico y desde lo mental mucho más, Rafael Nadal. Su victoria ante Juan Monaco en tres contundentes y fugaces parciales dicen en qué nivel o en qué escalón transitan cada uno la vida tenística de la ATP.

Si hay algo que no querés que te pase en tu vida tenística, es enfrentarte con Rafa Nadal. Como desafío tenístico, es algo único, pero no creo que nadie busque medirse con el español porque sí. Así estés en la cúspide del ranking, jamás te va a regalar nada. Pico Monaco habrá pensado de mil maneras llevar a cabo el partido, y está claro, que cómo salió no era una de las variantes procesadas en su cabeza. Porque Nadal no dio respiro, y lo dicen los números. Dos games ganados en un total de 14 (los dos primeros parciales) para el tandilense es pobrísimo por dónde se lo mire. Pero claro, entendiendo quién está enfrente, no sorprende demasiado. Recién en el tercer set, Juan encontró algo de lo que debía haber puesto desde el arranque, porque además de ver a un Nadal preciso, él estuvo muy contenido y con un juego corto, demasiado para la agresividad que muestra el manacorí.
Sin dudas que, ese era el punto en donde mas se esperaba una derrota de la Argentina. No se pretendía el milagro de Monaco, pero si llegaba a suceder que fantástico hubiese sido. Sin embargo, aterrizando en la realidad tenística que nos mostró Rafa, no hay demasiado para recriminarle o reclamarle al argentino. El partido fue una digna postal de lo que son hoy en día. Juan un tipo inestable, que suele tener puntos altos en ciertos momentos, pero que no se sostienen en el tiempo, ni en un partido, ni en un torneo, ni en el mismísimo año tenístico. Y del otro lado, el cerebro tenístico más grande que ha dado este deporte. Rafa se ha ido gastando físicamente con los años, y él ha hecho la referencia del “cansancio” por los años de carrera, pero todo lo que le puede llegar a faltar, le sobra en una mentalidad ganadora, infranqueable, marcada a fuego, clara, contundente y peligrosa para cualquier rival. Entonces las equivalencias no existen entre uno y otro, y hoy quedó claro.

EL REY DAVID

6-1, 6-7(2), 3-6, 6-4 y 6-3 fue el score del segundo singles de la serie de esta final… Aquí se vio otro cotejo, ni similar a lo que se observó en el primero. Un número 5 que fue semifinalista del Masters de Londres hace pocos días, enfrente, el hombre con el mejor regreso del año ubicándose en el 11º lugar del Ranking ATP, habiendo ocupado no hace mucho, el escalafón 485. Juan Martín Del Potro, La Torre de Tandil, chocaba potencias con el actual integrante del Top 5 del globo terráqueo, David Ferrer.
Y el partido fue cambiante, porque hubo grises en ambos. Momentos tensos, por lo que se jugaban ambos. La carta fuerte de Argentina estaba obligada a poner el 1-1 para que la serie siga viva y poniendo la firma a un resultado que el equipo sudamericano acordaba de antemano sin lugar a dudas. El valenciano en tanto, con la responsabilidad de movilizar el tenis de felpo, de dañarlo, de presionarlo y castigarlo con su defensa transformada en muralla. Y algo de todo eso pasó. Ferrer quizás, haya jugado el mejor partido de su carrera tenística, no por los aces, no por los winners, que seguramente ayudaron en el resultado definitivo, pero lo que influyó fue el trabajo punto a punto, no mostrarse débil, vulnerable, no aflojar, ser inteligente con el servicio, y facturar ante cada yerro del argentino. Y mucho de eso sucedió. Tanto que, Delpo arrancaba perdiendo con total claridad, hasta que despertó en el segundo set, creció desde su derecha y fue alimentándose de voracidad por conseguir cada punto. El segundo lo decretó con justicia en el tiebreak y levantó un tercer set que ya se iba a las manos del español. Como esa mina que perseguiste toda la noche, y antes de que se la llevara el otro del boliche, la arrebató Delpo y dijo: este set es mío. 6-3 dando vuelta un 3-1 y 15-30 con su servicio. Impresionante por donde se lo mire.

Ya en el cuarto y con quiebres que se prestaron entre ambos, llegaron al momento cumbre del partido. Decretándose el principio del fin. Porque Ferrer consigue un quiebre en 15 del saque de Del Potro, y se levanta todo Sevilla, toda España. 6-4, quinto set y una entereza física que asustaba. Juan Martín en tanto, mas alicaído, desconectado del chip ganador, perdiendo señal de su tenis, encontrando el número indicado para llamar a alguien que le de una mano, porque él ya no podía mas.
Ni lerdo ni perezoso, David se puso con velocidad y sin bajar su marcha 5-1 y con servicio para partido. Le pesó. Lo hizo pesar Del Potro, y la historia se puso 3-5 el argentino abajo, pero recuperando una de las rupturas. Está claro que Delpo debía ganar 4 games al hilo para llevarse el set sin ir a diferencia de dos, porque no hay tiebreak en el quinto parcial.
Lo definió en la segunda oportunidad el español, que celebró con todo este 2-0 para su país. Del Potro entre lágrimas, sin comprender como el partido se le escapó en ese cuarto set donde tenía que liquidarlo. Aunque David no le hizo ni una fácil al argentino, y ha crecido enormemente en estos últimos tiempos. No es el del 2008 en Mar del Plata, que perdió por escándalo ante su tocayo Nalbandián y sus secuaces López y Verdasco salvaron la ropa. Ni cerca de ese Ferrer estuvo hoy. Concentrado, filoso, firme en su hábitat natural como es la arcilla.
¿Qué queda para mañana? Rezar. Confiar en la ductilidad y el gran año que tuvo Schwank en el dobles con diferentes parejas. Confiar en un Nalbandián que saldrá con la sangre en el ojo, enbanderado en una venganza que quiere decretar para que Argentina siga vivo. Si había un punto que ya se da por ganado es el dobles. Pueden llegar a relajarse los españoles, son inestables Verdasco y López. Tienen exuberantes partidos o desconexiones para el olvido, como la de la semi ante Francia, donde se comieron un pesto que lo deben tener aún presente. La pareja argentina es candidata en este punto. También es cierto que los españoles pueden apretar el acelerador para cerrarlo definitivamente mañana, pero nadie les reprochará nada si pierden ante una pareja que creo, jugará por primera vez juntos, pero que ambos pueden entenderse muy bien en cancha.

La desazón de haber caído en los dos singles sólo nos hace pensar en un milagro deportivo que deberá empezar mañana, cuando el dobles salga a la cancha y se juegue algo más que la vida, para retener la serie y que la Ensaladera, siga sin tener un dueño en esta final. La Cartuja de España fue Ferrer, al que considerábamos punto ganado. No deberíamos confiarnos nunca con estos cracks, porque ya saben de jugar finales y de ganarlas. Mañana será otra historia, ojalá nos permitan David y Eduardo seguir soñando, total, no cuesta nada...
PALABRAS DEL EQUIPO ESPAÑOL

Nadal: “Hace una semana estaba acabado y ahora no soy humano”Ferrer: “Ha sido el mejor partido de mi carrera”
Costa: “Aún queda mucho y todo puede pasar”


Fotografías: http://daviscup.com