10 de septiembre de 2011

SE LAS VIERON NEGRA CON LOS PUMAS

Los Pumas cayeron en su partido inaugural del Grupo B ante Inglaterra
(vestida de negro) por 13-9. A pesar de la ajustada derrota, el equipo dirigido por el Tati Phelan dejó una grata muestra desde lo defensivo y el amor propio en la búsqueda de un try agónico.

RWC Nueva Zelanda 2001. Grupo B: Argentina 9 Inglaterra 13


5.10hs. marcaba el despertador. Momento de levantarse, preparar algo que nos acompañe en 80 minutos importantísimos en este Mundial de Rugby Nueva Zelanda 2011. Porque minutos después, los Albicelestes salían a la cancha a defender nuestros colores con alma y vida. De hecho, se notó en todo el partido esa defensa. Himno nacional cortado, con las últimas estrofas, pero no por eso poco emotivo. Abrazos y una imágen conmovedora de 15 fieras debilitadas por un instante ante la música que movilizaba sus corazones. Inevitable referencia a esto que ya se nos hace costumbre con Los Pumas, sin embargo, no deja de emocionarnos y sorprendernos.
El pitazo inicial mostraría un partido que ni el más optimista hubiese pensado o planeado. Unos Pumas aguerridos, agresivos y con la intención absoluta de jugar en campo inglés. Y en ese ir, encontró grandes oportunidades de abrir el marcador, incluso, hasta de marcar algún try. Se abrirían las puertas de los palos con un remate de Contepomi cerca de la H, que hacía delirar a los muchísimos hinchas argentinos y neoceolandeses, ya que Inglaterra jugó con una camiseta íntegramente negra y esto, ofuscó a los All Blacks y a su gente. Por eso, la inclinación de los locales a favor del equipo argentino.

Un partido planteado claramente por Santiago Phelan desde la batalla de los forwards, y a eso se dedicó durante casi todo el primer tiempo el conjunto nacional. Patada precisa de Wilkinson igualaba las acciones en 3. Argentina perdía dos piezas claves en este primer tiempo. En primer término (aunque continuó un largo rato en cancha) el ejecutante de los penales, Felipe Contepomi, sufrió un duro golpe en la zona costal y debió dejarle su lugar a Marcelo Bosch. Mientras que Juan Imhoff tuvo que reemplazar a un muy dolido Tiesi, por un tackle sin pelota que le produjo un fuerte dolor en el ligamento interior de la rodilla derecha. Mientras tanto, el dueño de las ejecuciones a los palos era Martín Rodríguez Gurruchaga. Por una patada certera del 15, Argentina se puso en ventaja por 6-3. Inglaterra abusó de las infracciones y Argentina no aprovechó todas las que tuvo a favor. Fueron 4 mal obradas por el mencionado Gurruchaga y una de Felipe. Inclusive, Argentina contó con un hombre más en el epílogo del primer tiempo, pero no supo concretar nada allí.

Tampoco fue la noche de Jonny Wilkinson. El apertura de Inglaterra anduvo por demás errático, y eso era para sacarle jugo. Finalizaban los primeros 40, con un marcador favorable pero poco real de acuerdo a las chances que manejaron Los Pumas para aumentar el score aún mucho más.

 

La segunda mitad nos depararía una nueva ventaja en el elenco nacional producida por un nuevo penal de Martín Rodríguez Gurruchaga. 9-3 la distancia que imponía el conjunto argentino. Inglaterra era pura confusión colectiva. El seleccionado argentino fue realizando modificaciones de acuerdo a los cansancios generados por este intenso y muy complejo encuentro. Salieron varios hombres de los forwards. Renovó la defensa para bancar el resultado y tratar de encontrar algún resquicio que permita agigantarla.
Inglaterra creció ante una jugada desprolija de Los Pumas en defensa y a 15 del final, consiguió el primer try del partido por intermedio de su medioscrum, quién ingresó en el complemento y cambió la iniciativa de ataque de La Rosa, hablamos de Ben Youngs. Se escabulló por el centro (donde pretendió atacar Inglaterra durante gran parte del cotejo) y consiguió 5 puntos vitales para dar vuelta un partido muy bravo. Conversión de Jonny, para poner a los europeos arriba por un poroto.


Luego. Argentina entraría en una nebulosa que le provocaría una nueva infracción en contra. Wilko esta vez no falló. Puso las cosas 13-9, y se fueron diluyendo los minutos a un desenlace poco deseado.
Armitage tackleado por Creevy. El inglés fue de lo más claro.

Los Pumas arremetieron de manera increíble, sin llegar a las cercanías claras del ingoal. Porque Argentina salió con posesión en mano casi debajo de los palos propios, con un amor propio y una vergüenza deportiva digna de imitar. Tremendos Gonza Camacho y el Chelo Bosch ganando muchos metros con slaloms. Lo mismo cabe para el incasable Agustín Creevy que le dio a Argentina lo que siempre suele darle desde su ingreso: batalla y metros, muchos metros. Un kick de Imhoff acorralado sobre la raya lateral, impidió continuar con una ofensiva que merecía ser try. La locura hubiese sido enorme. Pero nos quedamos todos con las ganas.


ARGENTINA:
15- Rodríguez Gurruchaga (6); 14- Gonzalo Camacho (7), Gonzalo Tiesi (-), Santiago Fernández (5), Horacio Agulla (7); Felipe Contepomi (5,5); Nicolás Vergallo (6); Juan Martín Fernández Lobbe (8), Juan Manuel Leguizamón (6), Julio Farías (6); Manuel Carizza (5), Patricio Albacete (6); Juan Figallo (6,5), Mario Ledesma (7,5), Rodrigo Roncero (6). Entrenador: Santiago Phelan.

El dato: Argentina se fue al descanso cometiendo sólo 4 penales. En el complemento, hizo 12 más. Totalizó 16 contra 11 de los ingleses.


¿POR DÓNDE PASÓ LA DERROTA? Un error, un desajuste, y fue un try decisivo para el destino del partido. Tal vez Los Pumas no deban fallar nunca en los 80 minutos para mantener el partido en sus manos, y en eso Phelan deberá ajustar algún detalle que sucedió en el match. Lo cierto es que Argentina dio una grata muestra de rugby, de corazón, de empuje y de solidez. Cuánto que valió la pena madrugar, cuánto que se esforzaron por lograr la victoria. Un equipo que está preparado para hacerle frente a cualquiera, a pesar de las lesiones de Tiesi y Felipe, a pesar del corte de Roncero a pesar de los golpes que sufrieron Ledesma y unos cuantos mas, Los Pumas siguen de pié queriendo hacer nuevamente historia, en la tierra donde nació el rugby.

GALERÍA DEL MATCH:
Ben Youngs de cara al try. Argentina no pudo pararlo.



Aquí, Martín con el juego de manos. Con los pies falló más de lo que metió.

En el piso, Figallo. De pié, Roncero. Y Felipe con el agua. Postal de mucho roce.

La emoción en las miradas de Imhoff, Campos y Galarza. Conmovedor instante.